jueves, 29 de septiembre de 2011

Repitiendo lo de "los repetidores".

En 1984, realizamos un estudio sobre "El éxito y el fracaso escolar en la EGB".
Veintisiete años más tarde las evaluaciones diagnóstica ministerial y el informe PISA vienen a decir lo que ya decíamos:
La repetición no es una solución al fracaso escolar sino que agrava la situación de quien es estigmatizado.
"El fracaso escolar es absolutamente acumulativo, ya que en cada curso hay más alumnos suspensos que en el anterior." (p.55)

Dice la evaluacion general de diagnóstico de 2010 que "El sistema educativo debe tener más flexibilidad ya que no existen expectativas de mejora en los resultados educativos del alumnado repetidor".

O bien, en el informe de la OCDE, realizado a partir de PISA 2009, "El sistema de repetición de curso agravaría las desigualdades sociales en el seno de la escuela".

Las cifras de repetición son alarmantes:
16% en el curso 2º de la E.S.O.
28% en el curso 4º de la E.S.O.
25% en el curso 2º del Bachillerato, donde ya no han llegado gran parte de los anteriores.

1 comentario:

oscar79k2 dijo...

Sin entrar a valorar si es mejor o no repetir, leer "...que no existen expectativas de mejora en los resultados educativos del alumnado repetidor." no me ha dejado una buena sensación acerca de esta opinión sobre la idoneidad de repetir o no repetir curso, porque parece dar a entender que en cuanto se repite se acabo la confianza en poder educar a esa persona. Si el análisis asumiera esa presunción creo que ya no es válido.

Tengo claro que "repetir" no es solución para el fracaso escolar, aunque quizás sí pueda ser una herramienta si está bien utilizada. Pero también tengo claro que en la escuela se educa, no sólo se enseña, y echo mucho en falta hoy en día que se trabajen dos cosas: el esfuerzo y la tolerancia al fracaso. Me parece que ambas son imprescindibles para funcionar en la vida.
Desde mi humilde experiencia educativa, generalmente en edades desde los 15 hasta los 17-18 años, percibo, más bien me lo transmiten con toda confianza, en los adolescentes que no tienen ninguna necesidad de esforzarse porque con el mínimo es suficiente. Siempre les digo lo mismo: puede que ahora sí, pero el día que salgas de esta casa donde te conocen de sobra y se te lleva entre algodones, si no estás acostumbrado a esforzarte lo pasarás mal, porque eso no se consigue en un día, sino que es un hábito que hay que alcanzar. Si tampoco te han enseñado a pasarlo mal, asumir un fracaso, trabajar para superarlo y ser consciente de que eso no minora tus capacidades, evidentemente cuando salgas de la escuela y algo no salga bien (como ocurre muchas veces en la vida adulta) también lo pasarás muy mal.

No digo que haya que repetir, entre otras cosas porque no tengo aún conocimientos sobre la enseñanza como para dar una opinión formada, pero creo que sería un error pensar que seguir adelante sin enseñar a asumir fallos va a ayudar a una persona.

He tratado de hablar de "personas" porque siempre me gusta hablar de que educamos personas, y porque creo que la reflexión sirve para algo más que los alumnos de una escuela.