viernes, 25 de mayo de 2018

“Los 7 Pecados Capitales de las NN.TT.”

Con motivo de una visita docente a la Università degli Studi di Bergamo en la que tenía que hablar de los MRP (Movimientos de Renovación Pedagógica), volví a curiosear la revista Acción Educativa, número 97 de enero de 1998, hace 20 años. Casi no recordaba que fue un momento en el que junto a Grassa Toro fui miembro del Consejo de Redacción de la revista. Pero lo que me sorprendió es volver a leer mi artículo “Los siete pecados capitales de las NN.TT.”. Me parecieron tan actuales, me sorprendió mi capacidad visionaria, que he decidido ir metiéndolos poquito a poco en mi blog. 

“Es obligado comenzar intentando acotar el término nuevas tecnologías para asegurarnos de que nuestro interlocutor está descodificando la misma idea que nosotros pensamos estar transmitiendo. 
Desde hace una década [1980-1990] con la popularización, mejor dicho, con la irrupción del ordenador, del computador, como un electrodoméstico más, se comenzó a utilizar esta terminología. Con la misma se trata, por una parte, de buscar una denominación más comprensiva y más importante que la de informática y por otra, se previene del error en que puede hacernos caer la aparición de nuevos cacharros (hoy mismo puede estar naciendo uno) que no sabemos donde clasificar y que utilizan en algún momento la tecnología informática. Piensen en el tamagotchi. 
La informática significó la aplicación de operaciones eléctricas y electrónicas para resolver problemas de tratamiento de datos muy numerosos como son los censos. De ahí, que utilice un lenguaje binario, un lenguaje máquina que convierte en dígitos cualquier información. 
Por esto, me gusta referirme con el término nuevas tecnologías a aquellas que en algún momento del tratamiento de la información la digitalizan. Entiendo como nueva tecnología: el tamagotchi, las máquinas de video-juegos, los ordenadores, la televisión por cable o por satélite, la fotografía digital, el teléfono móvil o el periódico elaborado en distintas ciudades.  
Igual que los cristianos católicos tienen los siete pecados capitales: soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia y pereza (Perdón, pero pensé que al lector como a mí, se le habrían olvidado) las nuevas tecnologías tienen pecados capitales en los cuales caen fácilmente. 
[Injusticia. Engatusadora. Pasividad. Infraestima. Individualidad. Soberbia. Control.]

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