El manifiesto de la redacción del telediario de TVE que parecía una queja, donde manifestaban que la ley electoral obliga a que la presencia de los partidos políticos debe hacerse en un minutaje proporcional a los escaños que tuvieron en las anteriores elecciones y que, según ellos y ellas, debía hacerse de acuerdo con criterios periodísticos. Esto me llevo a pensar como sería si estos "criterios periodísticos" estuvieran presentes; lo que me resultaba fácil porque sólo tenía que contabilizar cuánto aparecen cada uno cuando no hay campaña electoral.
Es un Trabajo Fin de Grado interesante que invito a realizar.
Pero lo que me preocupa mas no es solo la presencia mayor o menor de partidos de dudosa convicción democrática, sino que en la pantalla aparecen con mayor frecuencia los forajidos, los negacionistas, los tránsfugas, los corruptos y otros ejemplares de mal ejemplo. (no los nombraré para no darles más publicidad). Conocemos sus nombres, mejor que los de nuestros investigadores, los de nuestros sanitarios que consiguen con sus ideas (a veces, ocurrencias basadas en conocimiento contrastado) sacar adelante a hospitales descapitalizados o de maestras y maestras que tratan de preparar a las nuevas generaciones a un mundo complejo a pesar de las distracciones normativas y "pines parentales".
Admito que explicar la realidad es mucho más complejo que hacer un titular simplista pero a todas las personas nos toca bregar en estas aguas turbulentas, también a los periodistas.
En resumen, que lo del minutaje lo dejen como está porque mientras que los criterios periodísticos sean los que señale el dueño del medio, la libertad de expresión se reduce a la libertad del dueño.