No voy a hablar de los modelos de gobernanza que están de moda en el ámbito universitario, sino de quiénes son los que dirigen el destino de las mayorías, de las minorías y de nuestro cada día.
La respuesta oficial es que el pueblo que elige democráticamente a sus representantes cada cierto tiempo. Como respuesta de un libro de texto no está mal, pero la afirmación escuchada en la radio me hizo pensar sobre otra respuesta:
“Casi sería mejor que la decisiones las tomaran los ordenadores”.
Sabemos que la ciencia avanza una barbaridad y la rebelión del ordenador HAL9000 de “2001, odisea en el espacio” nos empieza a parecer MENOS ciencia ficción.
Porque si miramos la economía, son los algoritmos los que determinan dónde y en qué hay que invertir.
Si miramos a la política, los partidos funcionan según les señalan las encuestas, ya sé que las rellena el pueblo pero también los robots.
Si miramos al tráfico, las luces rojas y verdes se rigen según lo que señalan las cámaras de control.
Si miramos a los hornos de pan de tiendas 24h, las empleadas sacan el pan cuando lo señala la programación esté más blanco o mas tostado.
Y así, sucesivamente.