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Como Decano de la Facultad de Educación me siento orgulloso del grupo de estudiantes que analiza la LOMCE, que idea acciones reivindicativas, que trata de construir su futuro.
Hoy, que la encuesta de población activa ha señalado que hemos superado el listón de los seis millones de parados; sólo puedo dar ánimos a estos jóvenes para que luchen por su futuro. Por primera vez, no tengo palabras para la esperanza. Antes, los primeros años de diplomados los pasaban en el paro o preparando oposiciones. Se iba pillando cualquier trabajo para ir tirando. Finalmente, casi todos se colocaban dignamente aunque en algunos casos hubiera un cierto subempleo. Actualmente...
En cualquier caso, el otro día pensaba que los maestros y las maestras reciben un formación polivalente que puede servir como base para ocupaciones emergentes, esas que no conocemos, esas que precisa la sociedad de la información y del conocimiento.