miércoles, 6 de noviembre de 2024

Ensalada vs. Potitos - 2

Ensalada vs. Potitos 4 de abril de 2011, 

Hace cuatro años ya escribí sobre la new generation, la generación nintendo, ahora transformada en  "la generación ni-ni". En las conversaciones con colegas, con amigos, con conocidos salta de nuevo de un modo u otro este tema: ¿qué características tiene la próxima generación: la que nos gobernará cuando estemos en el asilo de ancianos o la que educará a nuestros nietos?


Especialmente en la Universidad, pero también en la relación con los hijos, tengo la sensación de que todo se da como la alimentación de los bebés, es decir, la realidad se ofrece bien triturada como si fuera un "potito". Y no lo considero conveniente. Facilitar la vida a las nuevas generaciones no significa presentarlo tan fácil que no exija esfuerzo:
"por favor, profesor podría repetir", "profesor, ¿dónde encuentro esa información ?, ¿la dejará en reprografía en los apuntes?, ¿podría decir exactamente qué es lo que va para examen?, ¿por qué no cuelga los apuntes todos en la misma plataforma? (sic) 
Es decir, todo masticado. Facilitar el trabajo significa dar herramientas, orientación; pero el aprendizaje es una cuestión personal. Nadie aprende si no es con su propio esfuerzo. Aprender a vivir no es posible sin esfuerzo salvo que nos implanten un chip inteligente que habrá sido programado por alguno que querrá cobrar.
Por tanto, yo como educador podré dar ensalada al gusto (con maíz o sin maíz, con cebolla o sin cebolla, con aceitunas o sin ellas, con ensalada blanca o verde o roja) pero no en forma de potito. O si quieren otra analogía alimenticia:
"La sopa de pescado la sirvo con cuchara pero no en biberón"

 Denébola Álvarez respondía con este texto: 

"Estoy de acuerdo con la metáfora, también digo NO al biberón y al orinal. Pero quizás no comparto una idea que subyace al post o que al menos encuentro entre líneas: parece que todos los nacidos después de la muerte de Franco sentimos indiferencia por todo lo que nos rodea.

Quiero señalar dos reflexiones al respecto.

El primero sobre la generación en general. Indignante fuertemente que nos caractericen como “ni-ni” cuando dudo que esa indiferencia y despreocupación ante la realidad que nos rodea sea mayoritaria. La verdad, me parece una generalización excesiva e inexacta, se parece a aquellos pronunciamientos sobre la LOGSE como la ley educativa causante del fracaso escolar. Quizás, para emitir un juicio adecuado, coincidamos en que debemos preguntarnos por la extensión de la escolarización, longitudinalmente -aumento del tiempo obligatorio- y transversalmente -porcentaje de población que accede a ella-. ¿No deberíamos entonces preguntarnos también por el aumento del nivel educativo o las diferencias en el acceso al mundo laboral en los últimos 30 años? ¿No deberíamos entender que las preocupaciones de la nueva generación cambian sin etiquetarlas de ni-ni?

El segundo, centrado en la universidad y la falta de esfuerzo de los estudiantes. Sin pretender quitar responsabilidad a los propios individuos, que deben esforzarse en aprender y no en aprobar, quiero resaltar los procesos de evaluación en los que hemos sido socializados a lo largo de la escolarización obligatoria y postobligatoria (excluyendo la etapa de educación infantil). La mayoría de los libros de texto que hemos manejado presentan la información como verdades indiscutibles que conducen a exámenes de conocimientos unívocos y en los que los estudiantes, perdón los examinandos, tienen el papel de recibir los contenidos unidireccionalmente. Una situación, que al cambiar el constructo “libros de texto” por “apuntes” se repite en las aulas universitarias (en mi experiencia personal más del 50% de las materias de grado que estudié en las Facultades de Ciencias de la Educación corresponden a esa descripción). Entonces, ¿qué concepto de ciencia transmitimos? ¿Y qué concepto de educación?

Ante esta situación, la pregunta “¿esto va al examen?” resulta inesperada. Para mí, no.

Hagamos que el aprendizaje sea divertido. Evaluamos las herramientas de enseñanza. Y no olvidemos que para entender el hecho debemos conocer el proceso."


domingo, 3 de noviembre de 2024

No me gusta a dónde va este mundo.

El otro día recordaba a las películas de Fumanchú que veía de pequeño. Hoy, después de cinco días después de la Dana, mi pesimismo va a más. 

Después de lo visto en las increpaciones en Paiporta, aunque ha habido algo más, pero sobre todo que se carga sobre todo contra Sánchez que si le culpo es de no haber tenido la valentía de declarar el estado de crisis y suspender la autonomía valenciana.

En USA, Trump gana las elecciones y si no las gana, asalta el congreso y la Casa Blanca.

En Oriente Medio, Netanyahu sigue masacrando palestinos y atacando la suiza de oriente medio (Líbano).

En el este, Zelesnki, Urban y Putin, además de algún otro siguen "jugando" con bombas de más o menos alcance.

En España, dimite Sánchez y nos Gobierna Feijoo con vicepresidente, Abascal y Ministro de Cambio Climático, Mazón

Además seguiremos haciendo las casas y los polígonos industriales y comerciales en los mismo lugares, las carreteras, las autopistas y las vías del ferrocarril: el de cercanías y el de alta velocidad.

Guerras olvidadas:

  1. Nigeria
  2. Somalia
  3. Sahel (Mali, Burkina Faso y Niger)
  4. República Democrática del Congo
  5. Libia
  6. Turquía (Conflicto kurdo)
  7. Yemen
  8. China (Xinjiang)
  9. Birmanía
  10. Colombia

viernes, 1 de noviembre de 2024

Las emergencias en España vs. Italia

     Dos frases de cómo nuestros vecinos italianos abordan las situaciones de emergencia:

"El jefe del Departamento de Protección Civil es el encargado de garantizar la organización de los servicios de emergencia y asistencia y adoptar, en caso
necesario, medidas provisionales que se consideren."
https://www.dsn.gob.es/es/actualidad/sala-prensa/terremoto-italia

"El Corpo Nazionale dei Vigili del Fuoco (CNVVF) es un cuerpo de seguridad pública de naturaleza civil de la República Italiana y dependiente del Ministerio del interior (Ministero dell'interno), en especial, del "Dipartimento dei Vigili del fuoco, dei soccorso pubblico e della difensa civile".
https://bomberosdelmundo.weebly.com/italia.html

    Con todo mi cariño para las familias de las víctimas
    Para ayudar hace falta coordinación y a veces sobra gente por el medio si no sabe que tiene qué hacer.

domingo, 27 de octubre de 2024

El culto a las mascotas

 Mascotas en Europa

Vacas en la India 

Gatos en Japón

Los ponemos en altar: más cuidados que a nuestros congéneres.

La caca de los bebes huele pero tienes la esperanza de que tarde o temprano aprenderá ir al baño. Pero de un perro, todavía no lo han inventado y los ayuntamientos ordenan recoger los excrementos de nuestras mascotas.

En mi entorno, familiares y amistades, los que no tienen descendencia son los que poseen perri-hijos, gati-hijos, tortugui-hijos, casi siempre por parejas para que el animal no se encuentre solo.  




martes, 22 de octubre de 2024

Book de pijamas (ZA-PÓN)

Tuve dudas de qué pijama meter en la maleta, así que puse dos: uno de verano y otro de otoño. Pero no hicieron falta porque en el primer hotel, un tres estrellas, no sólo ofrecían zapatillas y albornoz, sino también el pijama. Me parecía un poco pequeño y un poco grueso para el calor que hacia, pero lo probé y su tacto era agradable. Pensé que sería un detalle de este hotel que tenía el ambiente de un cuatro estrellas al menos; pero al día siguiente hubo la misma oferta y así en cada uno de los hoteles visitados menos al llegar al de Tokio.  Y pensé que me iba a hacer un book con todos los modelos.











Por tanto, cuando vayáis a Japón, no lleves pijama. El modelo y la talla era igual para hombres y para mujeres.

viernes, 18 de octubre de 2024

El mal de oriente a occidente

 Enumeraré casi sin comentar porque mi análisis es simplista. Solo trato de reflejar el pesimismo en el género humano. Supongo que nos refugiamos en nuestra individualidad, la mía es confortable en salud, dinero y amor; para poder afrontar la cotidianidad.

- España: enfrentamiento y polarización por cualquier cosa: Presupuestos, "anda que tú más", política exterior, medioambiente, inmigración, sanidad, vivienda, educación, etc. Bronca por todo y los problemas de la ciudadanía normal y corriente sin resolver o con "palos entre las ruedas" de las buenas disposiciones. 

- Europa: resolviendo el tema de la inmigración a melonazos. 

- USA: con cánticos a la guerra civil. Y éstos tienen todos armas.

- Africa: expoliada por la colonización, ahora los nuevos colonos vienen de China buscando metales raros.

- Israel: el Netanyahun masacrando como lo hizo Hitler.

- Zelenski: De actor a lider militar. "Denme armas para matar rusos como Putin mata ucranianos". ¡Viva el diálogo!

- Japón: todavía sumidos en la tradición de la sumisión y la lealtad al superior.

- La mujer en el ámbito musulman: Afganistan, Pakistan, India, etc.

- Korea del Norte, la dictadura de un iluminado

- China y su imperio. Ah! que sigue llamándose República Popular.

De pequeño veía unas películas de un malo Fumanchu que quería dominar el mundo y buscaba siempre destruir a los buenos. Entonces, ganaban los buenos. Ahora, hay muchos "Fumanchu".



Me bajo del autobús.


sábado, 12 de octubre de 2024

De vuelta a casa (ZA-PÓN)

En realidad, esta entrada comienza el día 11, viernes, a las 18 horas en Tokio y finaliza el día 12, sábado, a las 20 horas en Zaragoza, cuando en Japón serían las 3:00 a.m. del domingo día 13. 

Cuando me preguntan cómo son los japoneses, digo que son respetuosos, ordenados, poco flexibles y amantes de la jerarquía. Por eso, el comportamiento del grupo Pirené debió sorprender, “romper los esquemas”, a la guía japonesa que debía acompañarnos hasta el aeropuerto. 

17:40 Llega la guía japonesa. Pregunta por dónde está Carlos, como responsable del grupo. Todo el grupo está presente salvo Carlos que estaba realizando algunas gestiones de última hora. Le decimos que nosotros podemos bajar el equipaje.

17:41 Empezamos a cargar las maletas en el autobús y recogemos el equipaje de nuestro guía para subirlo al autobús.

17:45 La guía japonesa sigue preguntando por Carlos. Le decimos que esta llegando.

17:50 La guía japonesa sigue preguntando e intentando saber cuántos viajeros tiene que tener. Le ayudo a actualizar su listado ya que dos compañeros de viaje han salido con anterioridad para el aeropuerto.

17:59 Llega Carlos. Ya le hemos informado por teléfono que hemos cargado su equipaje. Y le aplaudimos porque lo sentimos como al líder y guía del equipo.

No tengo constancia de cómo la guía japonesa durmió esa noche y cómo comentaría con su familia su situación. Supongo que algo parecido a lo que dijo Obelix después de machacar a unos cuantos legionarios: “Están locos estos españoles”.

Proceso de check-in rápido. Diez horas en el primer vuelo hasta Doha que aprovechamos para descansar. Hemos estado pateando Tokio por unos 29.000 pasos y después de la primera comida, nos dormimos.


El aterrizaje en Doha nos sorprende con una iluminación que muestra la riqueza que proporciona el petroleo. Tenemos cuatro horas hasta el siguiente vuelo; por lo que Carlos nos regala una visita al jardín botánico del aeropuerto. Las dimensiones de la terminal hacen que no sea fácil encontrarlo. Me impresiona el ambiente que se puede crear en pleno desierto. En los baños, una persona facilita papel a quien lo solicita y mantiene las instalaciones limpias. Las tiendas son todas de lujo y están abiertas a esta hora, las 5:00 a.m.(hora local) y no están puestos los precios, tampoco intente preguntarlos.


El segundo viaje a Barcelona resulta muy pesado pero tenemos la esperanza de que podremos descansar en los próximos días. Al llegar, el autobús nos espera a pocos metros de la terminal. Son las cuatro de la tarde y después de las continuas comida en el avión no sabemos si debemos comer o cenar. En cualquier caso, se promete una parada a una hora para saborear comida tradicional española: bocadillo de jamón y tortilla de patata. 

La llegada a Zaragoza huele a fiestas del Pilar y nos resulta ambivalente la sensación: alegría por la vuelta a casa pero tristeza porque vamos a dejar de compartir experiencias con una personas desconocidas hace quince días pero  ahora son más que compañeras de viaje, hemos intimado para ayudarnos, para cuidarnos contagiados por la cosmovisión japonesa. 

viernes, 11 de octubre de 2024

Ciudad de contrastes (ZA-PÓN)

Nuestro último día en Tokio, en Japón. Vamos a aprovechar hasta el último minuto hasta las 18 horas en que subiremos al autobús para ir al aeropuerto. Nos levantamos a la hora habitual, desayunamos, cerramos nuestras maletas y a visitar la ciudad solos. Es distinto a ir en grupo porque nos movemos con mayor agilidad. Ya sabemos cómo funcionan los transportes públicos y nuestra velocidad se aproxima a la que tienen los ciudadanos de Tokio.

Comenzamos por el norte de Tokio para ir descendiendo hacia nuestro hotel que se encuentra al sur de la ciudad. El tren o linea circular del metro va a gran velocidad  cuando entra en las estaciones parece que no va a parar, llegamos a la zona de Akihabara, es el barrio tecnológico, donde se encuentra edificios dedicados a videojuegos de los que ignoramos sus personajes. El número de máquinas parece exagerado a esta hora de la mañana pero sabemos que a la tarde no será fácil encontrar un hueco. Probamos suerte con una de esas maquinitas que cogen un muñeco con una grúa como las que hemos visto en las ferias. Era nuestra última moneda de 100 yenes. Y no tenemos tiempo.


Hoy hace una temperatura muy agradable e invita al paseo por la superficie. Nos  dirigimos hacia la Estación de Tokio para admirar su fachada antigua que no vimos el día anterior. Pasamos por calles de una ciudad sin el agobio de las masas de turistas, no tienen mucho encanto pero permiten ver un Tokio más real: el de la anciana que cruza lentamente la calle con sus muletas, el respeto a los semáforos aunque no vengan ningún vehículo, los comerciantes que abren los negocios, el verdulero que sirve o pone bien su mercancía, el cartero que lleva sus cartas y paquetes, etc.


La explanada ante la estación de Tokio es tan espectacular como su fachada de ladrillo. Está dispuesta de tal modo que es como un ágora por su amplitud y porque está rodeada de altísimos edificios, y porque combina el cemento y el verde los árboles de forma armoniosa.

Vemos cerca, mejor dicho vemos en el lado oeste un parque que según el mapa son los Jardines del Este del Palacio Imperial. Aunque se ven autobuses de turistas, el jardín también refleja la normalidad de la ciudad: se uni¡Vita al relax no se admiten bicis, ni skates, madre con niño en el césped, señor trajeado comiendo un sandwich, dos jóvenes charlando, otro señor que lee un libro; como en un parque europeo.

Desde allí, siempre caminando, nos dirigimos hasta Ginza para contemplar otra y por última vez sus tiendas y sus originales edificios.

Como vamos cansados, cogemos el metro para llegar a la Torre de Tokio, otra de las torres desde donde ver la ciudad desde lo alto. Esta torre imita la Tour Eiffel parisina.

Ya sólo nos queda tiempo para comer en Shimbashi  y hacer algunas compras de última hora. 

A propósito de compras, próximamente dedicaré una entrada en este blog al Tax Free.

jueves, 10 de octubre de 2024

La quinta avenida de Tokio (ZA-PÓN)

Hoy toca día libre pero Carlos se presta a acompañarnos a ver unos sitios que no nos podemos perder. El parque de Ueno donde un museo de arte muestra en el exterior algunas obras de Rodin. El primer espacio cerrado para fumadores ya que no pueden hacerlo en la calle.

El mercado de la calle Ueno Ameyoko que aprovecha el espacio del viaducto ferroviario para darle un aire saneado y vivo a una zona que pudo degradar el barrio.

Luego nos desplazamos en metro hasta OmoteSando donde en una gran avenida encontraremos las grandes firmas, como en la quinta avenida de New York.  También aquí unos reducidos espacios donde se concentran los fumadores. 


Desde ahí, nos acercamos a Takeshita Street, la calle de las lolitas
de los adolescentes y jóvenes que gustan de la moda y de una contracultura que mezcla el chicle (sweet lolita) y el gótico (Gothic Lolita), junto a las tiendas de zapatos con plataformas de vértigo aparece un café especializado en la posibilidad de acariciar cerditos. No me estoy inventando nada.

Por la tarde, acudimos a comer a la zona de Shimbashi donde hay un reloj que a determinadas horas los mecanismos actúan al modo cómo ocurre en algunas ciudades del centro de Europa.

En el metro llegamos hasta la zona comercial de Ginza.

Por la tarde acudimos al Skytree, la segunda torre más alta del mundo: 470 metros. No resulta muy vertiginosa porque es de noche pero en cualquier caso es impresionante.

En su base, la globalización ha traído el Octoberfest. Al igual que ocurre en algunas ferias occidentales, no admiten tarjeta de crédito.  

La noche y nuestro cansancio después de doce horas de turista nos señalan el camino hacia el hotel. Atención a que el tren elegido llegue hasta la parada 05 sin tener que cambiar. 

miércoles, 9 de octubre de 2024

La gran ciudad (ZA-PÓN)

Hoy es el primer día en Tokio. El día que tendremos la visita guiada. Acudimos en grupo en el metro circular hasta Shimbashi Y desde allí tomaremos un tren especial (automático y sin conductor) que lleva hasta una isla artificial. Antes pararemos en la parada donde tomaremos un ferry que nos permite ver la ciudad desde el rio Sumida. Me permite ver cómo los edificios están preparados para el terremoto: ninguno está pegado a su vecino, ya sea nuevo o más antiguo. Así, podrán oscilar tranquilamente sin disturbar a los edificios vecinos.

Cuando desembarcamos podemos contemplar el edificio singular de la Asahi Group. La silueta del edificio es la de un vaso de cerveza, esbozado para complementar el edificio vecino en forma de jarra de cerveza dorada, el cual alberga las oficinas de Asahi Breweries.

Nos dirigimos al tempo de Senso -ji donde podemos observar los rituales tradicionales: la oración, la apertura de los papelitos de la buena fortuna a solo 100 yenes con la esperanza de que sea buena y sabiendo que si es mala, se arregla dejándola colgada en los alambres al efecto; la purificación con el agua, el incienso que lanzado sobre uno nos dará más inteligencia. 

Junto al templo, la calle comercial Nakamise: donde probamos un excelente sushi y shirimi en Sushi Edomaru Asakusa Honten; también el mochi dulce recubierto de miel y el de sésamo; las galletas de arroz y castaña hechas al momento.

Por la tarde, acudimos hasta el Ayuntamiento. Un ascensor nos conduce hasta el top de la torre con un mirador espectacular para ver Tokio desde las alturas y de forma gratuita. También descubrimos que nuestro guía el “Gran Carlos I” también es un excelente pianista que sin ensayar ni preparación alguna se lanza a tocar la canción Hija de la Luna de Mecano.


La guía japonesa nos regala tres lugares fuera de lo planificado: la calle del pis, una calle llena de garitos donde en la actualidad se toman aperitivos a la tarde; el gato en 3D; y el Gozilla de Shinjuku

Nos acercamos al  barrio rojo de Kabukicho que no presentó mayor interés para mí. Pero de vuelta a Shibuya, vemos un santuario sintoísta Hanazono en medio de grandes edificios que nos ofrece un contraste de reposo, de oscuridad, de silencio frente al bullicio , luminosidad y agitación de la calle por la que se accede.

De la cena en Shibuya, mejor no hablamos. En un viaje de dos semanas, la intuición falla alguna vez y esta noche toca. Así, que pasamos por el supermercado, cogemos nuestro yogurt  y algunas galletas para comerlas en el hotel.