Recuerdos

Estoy de limpieza este fin de semana. Cosas de la primavera y de las hormonas. Y he encontrado esto que corresponde al año 2007 por lo que cualquier parecido con la realidad actual, será por "chiripa".

"Hola majo, que tal. Ya estoy aquí de nuevo, he visto que no has parado con el blog, yo no he podido hacerte mucho caso, pero ahora con la rutina sacaré un ratillo. Me has dado vidilla con lo del blog en verano y quería agradecértelo  Yo sólo te remito algunos aprendizajes del verano:

1. No hacer la bomba en la piscina termal de un balneario llena de jubilados.
2.  No decir en alta voz y exuberantemente en un restaurante libanés: El cordero de Aranda si que es bueno!!!!!
3. No llamar al telepizza desde el restaurante del Hotel Palace de Madrid en aunque la comida sea una mierda (menudo bodorrio). El vino cojonudo.
4.  No intentar hacerse una foto montado en los Leones del Congreso haciendo el vaquero a las 4 de la mañana.
5. No intentar convencer al segurata del Congreso que no era un antisistema, mucho menos con un traje de cortefiel, y que no se queje que el primer plan era ponerle a un león un pegata del Athletic en los guebillos (lo de la ikurriña lo dejamos aparte por el clima político, incluso diciendo que íbamos de parte e Josu Jon).
6. No intentar convencer al segurata de que él, como opresor gregario, era también un oprimido y que debíamos unir nuestras fuerzas en comunión para derribar los muros que nos separan y.... vale, vale, ya me voy (no era muy partidario del diálogo, qué clima, qué país!)

Estos aprendizajes mejoran la salud y facilitan la vida en pareja.

Hay muchas más cosas que contar como el itinerario en el río Duero de 3 horas admirando, en la ida, los Arribes del Duero y en la vuelta el chorizo, el jamón  el queso, el vino, el licor café y otra serie de manjares que se llevo mi tía y que hizo la hora y media de vuelta que admiráramos mejor aún, por lo de la doble visión, el paisaje, la fauna que estábamos en el barco y las bilbainadas que cantábamos. También la estancia en F. con toda la familia (no es superado ni por "Gran Hermano"), la estancia en fiestas de C. (fantásticos los gigantes, el pañuelito rojo, la comida, la bebida, la gente...) 6 kilos más de peso tienen la culpa.

Ahora te dejo y como tengo que acabar la maldita tesis he decido no dejar por escrito el resto de las vacaciones pero si nos vemos con unos vinitos..."