Yo estuve ahí. Y me llena de orgullo participar con todos los participantes. Como siempre, José Luis (Aula Cella Cultural) me invita y si encuentro posibilidad, voy.
Este año más fácil con la autovía mudéjar casi concluida.
En Cella he encontrado amabilidad, gentileza, jamón, vino y unas excelentes patatas bravas. He comido, bebido, charlado, participado en un campeonato de guiñote con mi compañera Pilar Abós (No preocuparos no hemos ganado. De haberlo hecho, exigiríamos que las elecciones a Dirección o Decanato se resolvieran por esta competencia).
Y para finalizar, hemos visitado una excelente exposición de trajes regionales (con material recogido en el propio pueblo) explicada por un estudiante de magisterio que promete maneras didácticas.
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