La educación social constituye un campo de actuación cuya historía es paralela al Estado de Bienestar. Su vinculación con las políticas sociales, con la Administración es motivo de atención y de preocupación por el alto grado de dependencia. La educación social se presenta como lo no formal frente a la formalidad de la educación formal, la reglada, la escolar, la estructurada por niveles y etapas claramente definidas. Que se manifieste de forma diferente en ámbitos rurales y urbanos es muestra de su vinculación con lo social y lo político.
Un concepto habitualmente asociado a la educación social es el de intervención educativa, lo que presupone que la sociedad es pasiva ante la acción de un profesional avalado por la sociedad, por la política social.
A la educación social se le ha concebido como derecho o como inversión. El Welfare la incluyó entre los derechos ciudadanos para pasar, con la caida del Estado de Bienestar y la privatización de los servicios sociales, a ser una inversión de futuro.
La educación social se puede concebir de forma global como un único campo de actuación la sociedad o bien especificar las acciones como educativas (adultos o educación permanente), reeducativas (especializada) o de desarrollo personal y comunitario (animación sociocultural).
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3 comentarios:
Me apunto a la Educación Social: creo que serviría tanto de alumno como de docente. Todos podemos ser ambas cosas. Todos lo somos. Vivimos enseñando y aprendiendo. La ventaja de la Educación Social es que se aprende por el placer de aprender (y por la construcción de un pensamiento coherente, el recuerdo de material olvidado y otras muchas razones). Quiero matizar esto de "aprender por el placer de aprender" porque supongo que en la Educación Social no hay exámenes. Curiosamente de esto mismo hablamos ayer por la tarde en clase. La evaluación por el método del exámen (aunque sólo represente un 45% de la nota final) perturba inevitablemente el aprendizaje. El estudiante se hace un profesional, lo que significa que sabe estudiar para "aprobar", no para "aprender". Yo mismo lo soy: sé optimizar mi rendimiento al máximo pero siempre para obtener una mejor calificación, no para que mi corpus de conocimiento crezca. Por eso hago esta mención a la ausencia de exámenes, que no de evaluación. Aprender es un placer equiparable a cualquier placer. Y además es de orden exponencial, porque se aprende sobre lo que se sabe, sucesivamente. Y cada nuevo conocimiento reedita el placer del aprendizaje anterior sobre el que se sustenta.
Saludos
Alumnator
Nota: Enrique, ayer nos diste -una vez más- una lección de reflejos y agilidad difícil de encontrar. Una alumna te pregunta por las distintas herramientas de evaluación y tú sacas un pen-drive, lo pinchas al uesebé de tu portátil y, como por arte de magia, nos presentas un riguroso gráfico con los criterios de evaluación de tu asignatura. Olé tus recursos. Eres un crack. Te lo digo en serio. Tengo algunos años más que la media de mis compañeros del CAP (y hace años que trabajo en el mundo empresarial) y te aseguro que reflejos así no abundan.
Gracias por tus elogios alumnator. Me sirven para seguir haciendo las clases como me gusta, a pesar de que a veces aprecio caras de estupor y de disgusto por no ser un profesor que sigue fielmente el guión.
Me agrada igualmente que te apuntes al tema de la educación social y no te creas que no hay exámenes, también los hay. Debemos conocer hasta dónde hemos llegado.
Por cierto, alguna vez te podrías identificar y quizás pararnos a charlar sin el diferido de las nuevas tecnologías.
Muy buen post!!!!! Aún no he trasteado el blog, pero me parece muy interesante.
Alumnator, decirte que Si hay examenes en la Educación Social, vaya si los hay!!!!!!!!
Un saludo
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