Gracias por algunas de las palabras que escuché de sus labios el viernes, en la Jornada de Educación de Adultos.
Soy de las maestras que están en el programa de Educación de Personas Adultas desde 1984 y cada día estoy más entusiasmada con la actividad. Soy, también, una enamorada de la educación emocional y está más que incorporada a mis clases. Envío este email, además de para darle las gracias, porque tengo "redacciones" en abundancia de lo que la atención a algo más que la intelectualidad supone para mis alumnas y, como usted dijo, para la Seguridad Social. Vaya aquí un ejemplo: Dice G. M. de 69 años, a finales del curso 2009-10, y copio sus palabras:
"Este año voy a Salud Corporal, y desde que voy me encuentro mucho mejor de las cervicales, no podía volver el cuello, no podía llevar el brazo hacia atrás, ni me podía abrochar el sujetador y ahora ya puedo, las manos se dormían y tenía mucho dolor. Con tus clases me he quedado nueva, salgo muy relajada, si puedo, no dejo ni un día de ir, subo las cuestas más ligera, parece como si me crecieran los brazos, tengo la sensación de que me crecen y no me duele, las piernas más estiradas y el cuello más estirado, menos pegado a los hombros y cuando me duele la cabeza, me pongo el corcho quince minutos y se pasa el dolor, no me tomo pastillas y he dejado de tomar las pastillas y con tus consejos, me encuentro mucho mejor, y hasta la cabeza estoy mucho mejor y también desde que voy a la Escuela mi mente está mejor, me doy cuenta de las cosas, pongo más atención y nos enseñas a respirar y sigo tus consejos porque me van muy bien, para mi salud, y estoy deseando de que llegue la hora de ir a Diafreoterapia porque salgo nueva. Te doy las gracias por tu trabajo, y tu paciencia".
Si en algún momento necesita valorar "la otra educación" estaré encantada de prestarle estos testimonios que han sido posibles porque la Concejal encargada de la Educación en el Ayuntamiento de C. es una defensora de la educación personal y emocional tanto como de la racional.
Un saludo con mucho afecto, un abrazo envolvente y mi gratitud por sus palabras.
Pilar Langarita Aldea
1 comentario:
Son estas muestras de afecto y agradecimiento la que nos dan ánimo para seguir.La educación si no hace con corazón no se interioriza igual.. Un saludo
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