“El desprecio lo temen los poderosos porque les debilita, ellos prefieren ser odiados porque eso es reconocer su fuerza. Los débiles nos confirmamos en ese desprecio ajeno porque es nuestra identidad. “El que humilla será ensalzado”, lo dicen hasta los que necesitan dios, y es que al instalado en la sumisión no se le puede rebajar más.”que pensé en reflexionar sobre el gap, la brecha que se agranda, entre dos tipos de población: en la misma ciudad incluso en el mismo barrio, en la misma región, en el mismo estado, en el mismo continente, en el planeta.
“Mientras no te desprecies a ti mismo, ríete del desprecio ajeno y vive según tu propia verdad”
Si se utilizó el lenguaje bélico para referirse al Coronavirus, los perdedores serán los "sin camisa", aquellas personas que ni la suerte, ni la salud, ni el amor les sonrió. Mientras los que ya estaban el top, los de camisa, segunda residencia y carnet del club de los distinguidos ya saldrán adelante de un modo u otro.
Los medios de comunicación atienden las manifestaciones del Barrio de Salamanca y olvidan a los inmigrantes, escuchamos la voz de Europa pero ignoramos lo que está pasando en Africa.
Lo siento por quienes se ilusionaron con que ibamos a ser más solidarios. Claro que era dificil de creer esa ilusión cuando habíamos oír a Sarkosy en la crisis del 2008 de que era necesaria unas nuevas reglas de la Economía.
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