El patriarcado crece con el teletrabajo

El tele-trabajo ha venido para quedarse. Las grandes entidades, especialmente las bancarias, preven seguir con el teletrabajo sin fecha de caducidad.

El teletrabajo ha vuelto a colocar a la mujer en el hogar familiar durante todo el día y eso, en una pareja heterosexual, facilita que deba encargarse:

- del trabajo
- de la educación de los niños
- de la atención a sus padres
- de la limpieza de la casa.
- de la compra

Antes algunas de estas actividades estaban externalizadas: en la escuela, en las residencias o con la cuidadora, una persona iba por horas a limpiar y la compra conseguía que fuera una actividad conjunta de toda la familia.

Pero ahora, con un poco de suerte el compañero compartirá o mejor dicho le ayudará pero:
- su tele-trabajo será más importante
- los niños confían más en su madre porque ella es la que está al tanto de sus estudios
- el cuidado de los mayores siempre ha sido tarea de las mujeres
- y lo de la limpieza de la casa, pues ya se sabe que “no soporta ver las cosas sucias o fuera de su sitio”.

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