lunes, 27 de abril de 2009

Educación en España

En agosto de 2007, publiqué en este blog, mi impresión sobre cómo estaba la educación en España según cada etapa educativa. Hoy sigo estando de acuerdo con aquel texto y ahora que hay más comentaristas lo someto a consideración de los mismos.

Infantil
: la mejor, la que ha avanzado más. No es obligatoria pero la oferta pública casi cubre el 100% de la población por lo que son muy pocos los niños de esa cohorte de edad no escolarizados.

Primaria: Sin problemas, funciona relativamente bien. Desde su reducción a seis cursos comprensiva de los niños de 6 a 12 años, ha rebajado su nivel de conflictividad que se ha trasladado a la Secundaria.

El último informe de la OCDE muestra que en España cuenta con un menor número de alumnos por clase -20,8 niños-, (media de los países incluidos en el estudio-21,6 niños) España se caracteriza, según el informe, por tener menos alumnos en las aulas de las escuelas públicas -19,4 niños- frente a las privadas -20,9- o concertadas -24,7-.

Secundaria: Es la etapa crítica, quizás porque los principales elementos didácticos son problemáticos:

El profesorado: procedente del bachillerato, donde antes acudían el selecto grupo de alumnos filtrado por la educación general básica y obligatoria ( pasaban alrededor del 60%), no está habituado a tener que enseñar a aprender.

El alumnado: se encuentra en su primera adolescencia con sus problemas de identidad, desarrollo, grupos de iguales, etc. Por otra parte, se han incorporado alumnos procedentes de otras culturas para añadir complejidad al tema.

El contenido: los contenidos académicos son cuestionados por los alumnos, por los especialistas, por los políticos y por la sociedad en su conjunto.

El susodicho informe señala que la ratio es superior a la media (24,5 alumnos frente a los 23,9 de la OCDE)

Bachillerato: Es una etapa no obligatoria y por tanto sólo se suele discutir las opciones que se plantean que están en función de su carácter propedéutico para la Universidad. El título de Bachillerato no es reconocido ni laboral ni socialmente, se trata de una exigencia para acceder a estudios superiores.


Formación Profesional: Desde su reforma por la LOGSE, con la posterior dignificación de la misma, ya que hasta entonces eran unos estudios infravalorados y en ocasiones una “vía muerta” del sistema; se han constituido en ciclos formativos organizados en torno a las “familias profesionales” y que tienen tanto atractivo que significan una importante competencia para las Universidades, Muchos estudiantes prefieren acceder a unos estudios de dos años con un periodo de mil a mil quinientas horas de prácticas en los centros de trabajo y con una alta probabilidad de poder obtener inmediatamente un empleo; antes de iniciar una carrera de tres años como mínimo y con pocas prácticas y menos probabilidades de empleo.

Educación de personas adultas: Siguiendo las directrices europeas de el aprendizaje permanente (LifeLong Learning) trata de dar respuestas a las demandas de formación académica, profesional y personal de la ciudadanía.

Pero actualmente, las personas adultas que se preocupan por su formación permanente son pocas a pesar de la oferta pública.

“Sólo el 30 por ciento de los españoles de entre 25 y 65 años tienen estudios de primaria o inferiores, frente a la media del 14 por ciento en la OCDE. Una vez conseguido un puesto laboral, un escaso nueve por ciento participa anualmente en algún curso relacionado con su trabajo, frente al 40 por ciento de media de la OCDE.”

La situación no es precisamente óptima si bien se espera que la nueva Ley que posee por primera vez una propuesta de financiación, permita mejorar aquellos indicadores en los que España continua en la cola de los países de la Unión Europea.

El Gasto educativo de la Administración Central en España ha descendido del 5,4 (1995) al 4,9 (2002) del PIB que sitúa a España por debajo de la media de la OCDE ( 5,8). Si bien hay que considerar que la Educación en España está transferida a la Comunidades Autónomas por lo que producen desigualdades según la región que tomemos como referencia.

2 comentarios:

Raquel dijo...

Ahora la persona que tiene experiencia cuidando a niños pequeños puede recibir un títulado para poder trabajar con niños de cero a tres años. Eso hace ver que tamíen hay problemas en Educación Infantil...

De lo demás creo que igual, solo que están las competencias básicas en el medio...

Vicki dijo...

La formación para personas adultas y que trabajan es casi incompatible con los horarios españoles.