Primer domingo de confinamiento relajado, el sol brilla y es el día de la madre en España. En Italia y en América será el próximo domingo. Quizás por esto y porque mi madre falleció hace casi catorce años, no tengo especial sensación de celebración alguna.No habrán flores, no habrá comida especial y familiar, no habrá varios postres: los de casa ni los cogidos de camino a la casa familiar.
Por eso, me encuentro en un estado de melancolía por el ocaso de un confinamiento especial en el propio domicilio, por el recuerdo de la sonrisa y la alegría materna al llegar hijos y nietos a la comida.
Era fácil conocer el menú: Bolas de patatas rellenas de atún. Porque era el plato preferidos de todos sin excepción.
Tres párrafos. Ya he cumplido con mi compromiso diario. Sirva esta entrada para felicitar a todas mis amigas que tienen la condición de MADRES. Felicidades por ayudarnos a comprender el mundo.
QUE LAS MAMÁS PASÉIS UN BUEN DÍA Y LOS 365 SIGUIENTES, TAMBIÉN.
domingo, 3 de mayo de 2020
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1 comentario:
Me uno a tus sentimientos Enrique, que son los mismos en este día.Cuando se ha perdido a la madre la percepción y sensación de celebración deja de existir.No obstante nuestros hijos e hijas vienen pujando y por ellos hemos de seguir diciendo "viva el día de la madre"!!!
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