La educación es la llave del futuro

Como en el periódico Heraldo ha sacado una idea resumida de mis ideas, entremezcladas con la de otros, con un resultado final que no recoje mi idea de ser proactiva más que reactivo.
A continuación, trascribo lo que le envié a la periodista:

No por manida y repetida la frase: La educación es la llave del futuro está suficientemente interiorizada en la Administración, en la sociedad en general.

El modelo escolar que actualmente tenemos se creó en la era industrial y ahora necesitamos transformarlo para afrontar los retos de la sociedad del conocimiento y la caída del mundo de relaciones de producción y de valores del siglo XIX y XX.

La tarea es compleja y a largo plazo. Los cambios de los objetos materiales son fáciles pero cambiar el modo de pensar, las actitudes y los valores de la gente es difícil.

Pero como esto es un “decálogo” para un artículo periodístico, empezaré a lanzar ideas:

1. Coopago de los servicios educativos. Estamos dispuestos a pagar por cualquier necesidad y no por la formativa. Eso no significa una liberalización, sino que debe mantenerse la igualdad de oportunidades a través de un sistema de becas.

La educación universitaria subvencionada linealmente para todos es injusta ya que los que pueden deberían pagar su coste que serviría para subvencionar a los que no tienen recursos.

2. Liderazgo en la gestión de las unidades escolares: centros, y nuevas formas de gobernanza.

Es necesaria una combinación entre la participación de todos en la gestión, del desarrollo del concepto de ciudadanía del siglo XXI; sin olvidar la necesidad de que los líderes catalicen los cambios y el progreso sostenible.

3. Metodologías adaptadas a los destinatarios.

Tratamos de enseñar como cuando no había ni libros, ni ordendores, ni Internet. El profesorado pretende seguir siendo el que sabe todas las cosas, pretende seguir enseñando, cuando su objetivo es que los estudiantes de todas las edades aprendan.

Los estudiantes son de todas las edades. La Facultad de Educación de Zaragoza, cuya cohorte de edad debería ser de 18 a 23 años aproximadamente, tiene un 40% de estudiantes mayores de 25 años.

Los principios metodológicos son los de siempre: cooperación, descubrimiento, modelización, realidad, actividades lúdicas, indagadoras, manipulativas; si bien adaptados a las circunstancias y a los destinatarios actuales,

4. La formación, la educación como sector económico- locomotora.

En parte ya lo es, pero quizás no tiene el reconocimiento político y social necesario. Quizás debemos producir menos y gastar menos; en cambio, relacionarnos más.

5. Aprovechamiento de las tecnologías de la información y la comunicación

Las TIC son la herramienta adecuada para este mundo complejo, sostenible y donde las relaciones entre los individuos pasan de la competición a la cooperación. La excelencia individual no es posible, se precisa de la cooperación y la colaboración para obtenerla.

6. Trabajo interdisciplinar.

En un mundo complejo, no es posible abordar los problemas desde una sola perspectiva disciplinar.

7. Valores positivos, no contra el fracaso sino por el éxito. “Think positive” La acción debe ser proactiva y no reactiva. No tenemos que ir “contra” sino hacia un destino indefinido pero en la dirección acertada.

Las directrices del memorándum europeo sobre educación a lo largo de la vida señalan seis claves:

1.-Nuevas cualificaciones o competencias básicas para toda la ciudadania.

T.I.C. , cultura tecnológica, idiomas, espíritu empresarial, habilidades para la socialización; aprender a aprender, flexibilidad ante los cambios, gestionar enormes flujos de información.

2.- Más inversión en recursos humanos

Invertir en la propia formación. ¿Por qué estamos dispuestos a pedir un crédito para un piso, para las vacaciones y no para inscribirse en un máster? ¿Por qué los libros de texto nos parecen caros y las copas a cuatro euros baratas?

3.- Innovación en la enseñanza y el aprendizaje

Sistemas didácticos centrados en el usuario, con fronteras permeables entre sectores y niveles. El profesor cambia de rol: ahora es guía, tutor y mediador. Reforma de la formación inicial y continua del “profesorado” para que se adapte a la panoplia de contextos de aprendizaje y grupos destinatarios.

4.- Valorar el aprendizaje formal, no formal e informal.

La formación no sólo se adquiere en el sistema educativo. La experiencia y el conocimiento informal, el aprendizaje entre iguales puede tener tanto valor y utilidad como el que se adquiere en el sistema educativo formal.

5.- Potenciar los servicios de orientación y asesoramiento con profesionales interdisciplinares que combinen las técnicas de orientación con el conocimiento del sector productivo o de servicios específico.

6.- Acercar el aprendizaje al hogar

Las escuelas y centros de formación se deben convertir en centros locales de aprendizaje polivalentes, conectados a Internet y accesibles a personas de todas las edades. (punto 26 conclusiones Lisboa)