Esculturas en mi ciudad

 No es Zaragoza una ciudad donde disfrutemos de esculturas a la altura humana como he podido disfrutar por algunas ciudades europeas. Por eso, he empezado a una recopilación de imágenes de las esculturas presentes en la ciudad, concretamente las existentes en el Parque Grande José Antonio Labordeta. Aunque en la elaboración de esta entrada he encontrado que en internet ya estaba hecho el trabajo que pretendía. En cualquier caso, estoy muy satisfecho de la investigación realizada.

Hay que señalar que las fotos no tienen buena visibilidad no sólo por el hardware empleado sino también porque la situación de la esculturas, bustos principalmente, y los materiales empleados: piedra y metal no permite que destaquen suficientemente del bosque de árboles. No propongo talar árboles sino sacar los bustos de esos sitios. Algunos de ellos se encuentran en mal estado de conservación y han sido vandalizados en varias ocasiones.

Dos grandes esculturas:

El batallador, Alfonso I, preside desde la parte alta del parque:

En un lugar menos privilegiado, apartado diría, junto a la Terraza Las Ocas (esperamos que este quiosco perviva a la piqueta, no le suceda como a los otros tres que había), nos encontramos... 

...otra escultura dedicada a la exposición Hispano-Francesa de 1908 en conmemoración de los sitios con la palabra PAX, y un largo texto: "Se erigió este monumento en memoria de la exposición hispano-francesa celebrada en Zaragoza MCMVIII para solemnizar el primer centenario de los gloriosos sitios que sufrió de los ejercitos franceses en la Guerra de la Independencia con esta obra de paz y de concordia."

En uno de los lados figura el busto de Basilio Paraíso, un médico aragonés, fundador de la Veneciana, empresa de cristales que a finales del siglo XIX adquirió gran relevancia, fundador de la sociedad editorial del Heraldo, escaño en el Congreso de los Diputados.  Su destacada participación en la organización de este certamen, fue compensada con el nombramiento como hijo adoptivo de la ciudad de Zaragoza, siendo designado paralelamente por el gobierno de la nación como senador vitalicio.

Luego predominan los bustos dedicados a ilustres ciudadanos de los siglos XIX y XX:

Dr. Cerrada, médico ocupó diferentes cargos políticos entre ellos el de Alcalde de la Ciudad de Zaragoza (1905-1906) que debemos agradecerle la implantación del alcantarillado.

Vicente Galve Sanchez Plazuelos, concejal benemérito creador de este parque.  La placa pone el año 1952, aunque fue concejal desde 1913 a 1927 y fue impulsor para su construcción recibiendo el nombre del dictador Primo de Rivera (1923-1930).

También figuran algunos artistas: como el tenor Miguel Fleta, 

El cómico Martínez Soria (1902-1982)

El actor Miguel Dicenta (1905-1974)

 Eusebio Blasco, (1844-1903) escritor, periodista y dramaturgo muy prolífico.

También un memorial homenaje a los zaragozanos que estuvieron en los campos de concentración nazi con este largo texto que se lee con dificultad. Parece que la característica de estos homenajes es la de "pasar desapercibidos":

"El Ayuntamiento de Zaragoza en homenaje a los aragoneses confinados en los campos de concentración alemanes durante la segunda guerra mundial". (Septiembre, 1985)